Un grupo de niños canta la canción “No depende de mí” de María Colores. Algunos estudiantes tocan el pandero, otros soplan y tocan la melódica, mientras una niña marca el ritmo con un tampor. Ellos forman parte del Coro de las Emociones de la Escuela Manuela Anabalón Sáez de Panguipulli, el tema presentado está relacionado con aceptarse uno por lo que es, para aprender a aceptar al resto. La interpretación musical marcó el inicio del seminario “Intercambio de Experiencias en Convivencia Escolar”, realizado en el Teatro Educativo de las Artes de Panguipulli.

La jornada formó parte del Componente de Formación del programa “A Convivir Se Aprende” que es ejecutado por el equipo Valoras UC en conjunto con la Secretaría Regional Ministerial de educación (Seremi) en la Región de los Ríos. La cita contó con tres experiencias sobre convivencia escolar, que fueron expuestas por la La Escuela Manuel Anabalón Sáez de Panguipulli, el Centro Educación Integral de Adultos Latinoamericano de Lago Ranco y la Escuela Padre Luis Beltrán de Mariquina. Las ponencias contaron con reflexiones y comentarios por parte de Isidora Mena, directora del programa Valoras UC y Cristian Bellei, sociólogo, magíster en política educacional y doctor en educación.

La primera experiencia correspondió a la Escuela Manuela Anabalón Sáez de Panguipulli. Ésta cuenta con un 95% de vulnerabilidiad y carecía de un vínculo entre los profesores y estudiantes. Frente a esto, el Equipo de Convivencia desarrolló un banco de herramientas. Una de las actividades consistió en que todos los días, durante los primeros 15 minutos de la jornada, el profesor jefe saludaba y conversaba con los estudiantes de su respectivo curso.

Por otra parte, El Centro Educación Integral de Adultos Latinoamericano de Lago Ranco expuso su experienca donde abordaron el contexto de la realidad local para fomentar el desarrollo socioemocional de sus alumnos, para ello realizaron actividades como ir al río Nilahue para reflexionar sobre el autocuidado, además de conmemorar fechas como el Día del agua, el patrimonio cultural y local y el We Tripantu.

 

La última exposición fue de la Escuela Padre Luis Beltrán de Mariquina. El establecimiento diseñó un plan de formación ciudadana con el objetivo de fortalecer la salud mental y la convivencia escolar. Una de las acciones fue la creación de un Gobierno Estudiantil, donde los alumnos formaban ministerios y organizaban actividades como ciclos de cine enfocados en derechos humanos e infancia, ferias gastronómicas y conversatorios ciudadanos. “Hoy hemos transitado hacia un nuevo concepto que es la formación ciudadana. Antiguamente la gente le llamaba educación cívica, pero la educación cívica apuntaba a lo netamente político. En cambio, la formación ciudadana es mucho más amplia y engloba muchísimas temáticas, incluida la salud mental”, afirma Oscar Bruggink profesor de historia, geografía y ciencias sociales de la Escuela Padre Luis Beltrán.

Isidora Mena detalló la importancia de este seminario: “El protagonista era la escuela. Y los expertos teníamos cinco o seis minutos para hablar cada uno. Está muy centrada en aprender de lo que están haciendo las escuelas y eran parte de la experiencia experta en terreno”, afirma.

El encuentro, realizado en el Teatro Educativo de las Artes en Panguipulli (TEAP) contó con la asistencia de más de cien personas, principalmente Equipos de Convivencia de las ocho comunas que forman parte del programa “A Convivir se Aprende” ejecutado en la región: Panguipulli, Mariquina, Lago Ranco, Río Bueno, Futrono, Lanco, Paillaco y Los Lagos. “Anotamos muchísimas ideas de las experiencias de los colegios que expusieron. Son otras realidades, pero las podemos ajustar a las nuestras en el tema de formación ciudadana. Si bien nosotros trabajamos algunas temáticas, recojo algunas ideas que vamos a compartir con mi equipo de convivencia escolar”, afirma Jessica Cáceres, encargada de convivencia en el Liceo Rodulfo Amando Philippi de Paillaco.

El Seremi de Educación en Los Ríos, Juan Pablo Gerter Urrutia, también estuvo presente en el seminario y abordó el trabajo realizado durante este semestre. “Programas como ‘A convivir Se Aprende’, que está siendo ejecutado por Valoras UC, nos permiten identificar roles, acciones, trabajar herramientas y diría que las comunidades valoran mucho eso: Cómo llevar a la práctica y en concreto la convivencia escolar”, afirma y agrega: “Hemos recorrido y las escuelas agradecen mucho que se les valore el trabajo que hacen, como los insumos para que ese trabajo tenga el mismo sentido que ellos necesiten”.